Bailajuegos

No lo quería contar, y no es que me avergüence de ello, pero aquí donde me veis antes de meterle mano al teclado viajaba por toda España y parte del extranjero (Marvao y Olivenza Oeste principalmente) vestido con mono vaquero, bombín y camiseta roja. Sí… si… ¿os suena ya?

Efectivamente… yo antes era uno de los integrantes de “Bailajuegos”.

Era una época loca, eres joven - la juventú es lo más grande, camarada - e insensato y quieres
probar de todo, sin pensar en las consecuencias.

Ahora lo recuerdo como algo bonito, pero no puedo olvidar lo duro que fueron los comienzos.

Duro porque yo procedía de otro sector que nada tiene que ver con este: el del METAL. Concretamente el heavy metal. Esto suponía que de un día para otro yo pasaba de cantar el jaigüeitujel al soyunataza.

Aunque ya que estamos dispuestos a confesarlo todo, en realidad el cambio no fue tan drástico, pues en el verano antes de incorporarme al Bailajuegos, estuve trabajando de gogó en el chiringo de Maria Jesús, la del acordeón. Casualidades de la vida que me encontraba de vacaciones en Benidorm y me llamó mi representante para informarme que Maria Jesús necesitaba un músico-bailarín que le hiciera las córeos. Esto es porque el público de estos garitos es de “pasodoble para todo” y necesitaba a alguien que le enseñaran los míticos pasos de pajaritos a bailar cuando acaban de nacer la colita han de mover chu chu chu chu.

Bueno, bueno, bueno… el resultado fue espectacular. El público se vino arriba, dejaban aparcados sus tacatacas y se meneaban como si sus caderas no tuviera fin. De hecho, la fiesta se prolongó y tuvieron que desalojar el local con alguna que otra redada de pastillas, Sintrom e Inistol.

Fue ese otoño cuando se formó la archiconocida group band infantil.

Comenzamos en el garaje de un compañero, El Greñas, grabando vídeos y colgándolos en youtube. Al principio todo eran risas y buen rollo pero la fama nos llegó deprisa con visualizaciones que superaban a las de “Sole que te meto con el mechero”. Nos convertimos en imprescindibles en todo circo o teatro que se aprecie desbancando al TresDosUno del momento: Pocoyó, Bob Esponja y Dora la Exploradora.

Los inconvenientes propios de la fama: las drogas, el Interviú y los programas de Sálvame, complicaron más la continuidad del grupo y acabó disolviendose a finales de año.

Actualmente alguno de nosotros tenemos algún que otro cameo en “Amar en tiempos revueltos” y algún que otro reencuentro en el programa de Maria Teresa Campos.

Una pena, pero siempre nos quedará nuestra taza, tetera, cuchara…

3 comentarios:

  1. ¡Qué sorpresa Alpargatero! Aquí, un fan de los cantajuegos. Su hit Zapatero Remendón lo peta. Al nivel de Thunderstruk de ACDC o el In De Guetou, del príncipe gitano.

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    1. Qué grande Zapatero Remendón, que pese a pertenecer a la cara B de nuestro primer disco y sufrir malas críticas, conseguimos que petara en todo cumpleaños o fiesta infantil, convirtiéndose en tan imprescindible como unas medias lunas o un sándwich de nocilla

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